Para casi todas las peticiones migratorias familiares y para algunas de empleo se requiere que el solicitante (el familiar o el patrono) firme un documento llamado el “affidavit of support”, donde demuestre que tiene los recursos suficientes para cuidar del inmigrante en caso de que este no pueda trabajar o mantenerse por si solo. El propósito de esto es dejarle saber al gobierno que esta persona no se convertirá en una “carga pública”, mantenida con fondos del estado.
En muchas ocasiones, el solicitante se encuentra en la situación donde no posee los recursos o ingresos necesarios, según la ley, para probarle al gobierno que puede cuidar del inmigrante. En estos casos, se busca a otra persona que esté dispuesta a firmar el “affidavit of support” como un “sponsor” o auspiciador.
Al firmar el documento, el auspiciador entra en un contrato con el Gobierno de los Estados Unidos donde promete hacerse cargo del inmigrante, de ser esto necesario. Si el inmigrante recibe asistencia de alguna agencia federal, estatal, o local, dicha agencia puede cobrarle al “sponsor” el costo de la asistencia otorgada al inmigrante.
Esta es una responsabilidad grande que se comparte entre el solicitante, el “sponsor” y el inmigrante. Aunque en la mayoría de los casos, el auspiciar económicamente a un inmigrante no genera problemas y no ha requerido de que un “sponsor” pague por sus gastos de manutención, es muy importante que todas las partes estén conscientes de las implicaciones de firmar el “affidavit of support”.